Una fragancia envolvente que se abre con las notas jugosas de grosellas, melocotón y bergamota, creando una apertura afrutada y deliciosa. En el corazón, las suaves notas florales de violeta, jazmín y rosa se combinan, añadiendo una elegancia dulce y cálida. La base de vainilla de Madagascar y almizcle aporta una profundidad reconfortante y sedosa, creando una experiencia olfativa rica y acogedora. Deja una huella suave y reconfortante en el aire. Esta vela es ideal para quienes buscan una fragancia dulce y envolvente, que fusiona lo afrutado y lo floral con una calidez deliciosa, perfecta para crear una atmósfera acogedora y ligeramente indulgente.

INTENSIDAD

Nuestros difusores de caña están elaborados con materias primas nobles y sostenibles de alta calidad, garantizando un producto saludable y respetuoso con el medio ambiente. Su base de origen vegetal y su composición cuidadosamente seleccionada permiten una difusión continua y equilibrada, llenando tu espacio de armonía y bienestar de manera natural.

Inspirados en la perfumería de autor, sus acordes aromáticos han sido seleccionados y combinados meticulosamente para crear una experiencia sensorial única. Cada nota se despliega gradualmente, transformando cualquier ambiente en un refugio personal donde puedas relajarte, reconectar contigo mismo y disfrutar de una atmósfera acogedora y sofisticada.

Duración aproximada: 3-4 meses
Volumen: 100 ml
Incluye: 7 cañas de madera

Retira el tapón del frasco y coloca las varillas de caña en el interior, permitiendo que absorban la fragancia. Pasados 10 minutos, dales la vuelta para potenciar la difusión del aroma.
Para una mayor intensidad aromática, gira las varillas cada 3-4 días.
Ubica el difusor en un espacio ventilado y seguro, evitando corrientes directas de aire que puedan acelerar la evaporación.
Ajusta la cantidad de varillas según la intensidad deseada del aroma y el tamaño del espacio.


Mantener fuera del alcance de niños y mascotas. Evitar el contacto directo con la piel y los ojos; en caso de contacto, enjuagar con abundante agua. No ingerir. En caso de ingestión accidental, consultar a un médico inmediatamente. Colocar sobre superficies estables y resistentes a líquidos para evitar manchas. Mantener alejado de fuentes de calor, llamas o superficies calientes.